«Que un excelente psiquiatra como José Luis Pedreira publique unpoemario íntimo, donde la soledad, el amor y la búsqueda constante dealgo diferente, de algo nuevo, sean parte de su temática, pone demanifiesto dos de sus facetas más sobresalientes: la primera, su granhumanidad, que lo lleva a desnudarse y mostrarnos los sentimientos más profundos de la condición humana con total sencillez y emotividad; la segunda, su enorme capacidad para abordar cualquier temática,cualquier proyecto, con tal solvencia y lucidez, que su envidiabledialéctica siempre me recuerda a los grandes maestros delrenacimiento. Dos características de José Luis, entre otras muchas,que hacen de su persona y de este poemario un buen ejemplo de empatía, de honradez y de sinceridad con uno mismo y con los demás.» MontxoArmendáriz