ARACIL SANTONJA, JAVIER
Este libro es una especie de autobiografía académica de su autor, Javier Aracil, pero su interés no se limita a la vida de este profesor de ingeniería, sino que a través de ella se muestra la evolución de los ingenieros dedicados a la enseñanza técnica superior durante los últimos 50 años. Desde la aparición del título de doctor ingeniero, a finales de los años cincuenta, se ha producido una profunda transformación en la dedicación a la enseñanza y la investigación de los profesores de las escuelas de ingenieros. En el libro se tratan esos cambios, especialmente referidos a la vida de su autor.
Al mismo tiempo se exponen los orígenes y parte de la historia de la Escuela Técnica Superior de Ingeniería de la Universidad de Sevilla.
Además, se analiza la especificidad de la ingeniería. Con frecuencia, en los medios intelectuales se ha desarrollado una cierta tendencia a considerarla meramente como ciencia aplicada, sin concederle ninguna entidad propia de rango superior, quedando reducida, por tanto, a una labor subalterna, aunque estuviese dotada de gran incidencia en la sociedad. Ello ha acabado produciendo una imagen distorsionada de la ingeniería en la opinión pública. En este libro se cuestiona en profundidad ese punto de vista, y se pretende restituir a los ingenieros su papel determinante en la invención y fabricación del mundo artificial que nos alberga, y en el que se consigue una vida más hospitalaria, prolífica, grata, confortable y benigna que en el natural.
En el libro se desarrolla una reflexión en la que se indaga sobre los rasgos específicos y autónomos que caracterizan el modo de actuación de los ingenieros, y que ha producido el mundo artificial poblado de artefactos, dotados de utilidad, en el que vivimos en nuestros días.